¿Qué es la enfermedad de Parkinson?
La enfermedad de Parkinson es una enfermedad progresiva del sistema nervioso que afecta el movimiento. Suele comenzar entre los 50 y 65 años de edad. Aunque es un padecimiento crónico, puede ser tratada y controlada eficazmente.
Se presenta en mujeres y hombres, sin embargo, se reporta una mayor prevalencia en hombres que en mujeres.
Está asociada a la disminución de producción de dopamina por las neuronas, esta sustancia es primordial para el funcionamiento del cerebro que interviene entre otras funciones a los mecanismos del movimiento.
¿Cuáles son los síntomas?
Los síntomas generalmente se desarrollan lentamente a lo largo de los años. La progresión de estos frecuentemente es diferente entre cada persona. Las personas con enfermedad de Parkinson pueden experimentar:
Temblores, principalmente durante el reposo.
Lentitud (Bradicinesia), movimientos lentos y reducción de la expresividad de la cara).
Rigidez (Hipertonía), los músculos presentan rigidez y son poco flexibles.
Problemas al andar y de equilibrio.
Variaciones en la escritura, la escritura a mano puede volverse más desordenada y pequeña.
Otros síntomas comunes pueden ser:
Cambios de estado de animo, incluyendo depresión.
Dificultad para masticar y tragar.
Estreñimiento.
Problemas del sueño.
Problemas en la piel.
La importancia de identificar los síntomas iniciales
Muchas personas consideran que las señales iniciales del Parkinson son señales normales del envejecimiento. Lo cual ocasiona que muchas no busquen ayuda.
Es más probable que los tratamientos sean efectivos si una personas los toma en el desarrollo temprano de la enfermedad de Parkinson. Por esta razón, es importante que, de ser posible, se obtenga un diagnóstico temprano.
Si presentas alguno de estos síntomas es importante consultar a tu médico quien podrá diagnosticar si estos se deben a esta o a otra enfermedad.
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